martes, 4 de abril de 2017

Pollice verso, Pedro Antonio


Corría el año 59 de nuestra era en una de las principales ciudades del Imperio de Roma: Pompeya. En dicha ciudad había un auténtico fervor por los juegos de gladiadores. A tal nivel llegó el entusiasmo que dicho año uno de ellos acabó en una auténtica batalla campal habiendo multitud de muertos y heridos. El emperador, Nerón, determinó una de las decisiones más difíciles de su reinado: prohibir durante 10 años los espectáculos circenses en Pompeya. 

Pollice Verso, Cuadro de Jean-Leon Gerome (1872)

Como si de una maldición bíblica se tratara, a raíz de esta decisión la ciudad selló su sentencia de muerte y primero un terremoto en el año 62 que la destruyó y dejó en ruinas y posteriormente la erupción del volcán Vesubio el 24 de agosto del año 79 acabó con la historia de Pompeya. 

Pompeya y el Vesubio al fondo

Casi dos mil años más tarde y un territorio también damnificado por los terremotos (el último gran terremoto se produjo en mayo de 2011 y produjo la muerte de varias personas en Lorca), el PP fue severamente castigado en las urnas. La actual portavoz del Gobierno, Noelia Arroyo, ha repetido hasta la saciedad que el PP quedó a 900 votos de obtener una nueva mayoría absoluta. Es darle la vuelta a lo que realmente decidieron los murcianos en las últimas Elecciones a la Asamblea de la Región: cambio.

La Región de Murcia, 22 años en poder del PP se ha teñido de corrupción. Hasta 33 de los 45 municipios que tiene la Región, están manchados o salpicados de casos de corrupción del Partido Popular. Ante esta situación, C’s hizo firmar en el pacto de Investidura a Pedro Antonio Sánchez, una garantía de verdadera regeneración, ejemplaridad y lucha contra la corrupción: dejar el cargo en caso de imputación (ahora investigación). Pedro A. Sánchez… firmó y fue investido presidente del Gobierno. 

En 2011, el PP obtuvo 382.569 votos, casi un 60% de los votos emitidos y 33 de los 45 diputados de la Asamblea. 4 años de Gobierno de Rajoy, recortes, engaños y corrupción después, el PP se ha quedado con 236.456 votos (casi un 40% menos de votos), un 37% de respaldo electoral y 22 diputados (un 33% menos de representación).  

Elecciones Autonómicas a la Asamblea de la Región de Murcia (2011 y 2015)

Efectivamente, con una caída del 40% de votos y no llegando ni al 38%, el PP quedó a un puñado de votos de revalidar la mayoría absoluta. Era tan desproporcionada y tan injusta la ley electoral de la región murciana dividida en 5 comarcas, que lo primero que se hizo en la presente legislatura (julio de 2015) y por unanimidad (a rastras, pero acabó sumándose también el PP) fue modificarse la Ley Electoral hacia una circunscripción única y rebajando el listón del 5 al 3% que dejó fuera de la Asamblea a IU en 2015.

Desde entonces, la alargada sombra de la sospecha ante el personaje que presume de que le han denunciado más de 16 veces se fue alargando. Hasta que la 17ª imputación llegó. Febrero de 2016. Y el Presidente Imputado, se negó a cumplir el acuerdo que le había llevado al gobierno, quizá en la creencia de que el procedimiento sería rápidamente archivado y, sobre todo, arropado por todo el Partido Popular y de su presidente, Mariano Rajoy en primera persona, que teniendo reciente cómo fueron los últimos días de Rita Barberá, se conjuraron a no dejar caer a otro imputado. 


Hasta tal punto llegó el apoyo al Presidente Imputado, que fue elegido Presidente del Partido Popular de la Región de Murcia con casi unanimidad: más del 90% de los apoyos en el Congreso en el que relevaba al eurodiputado y presidente de la Región durante 20 años, Ramón Luis Valcárcel

Ciudadanos en un primer momento, dudó. Y tras mantener una reunión con el PSOE para acercar posturas en una moción de censura, dio cuerda al reloj y puso una fecha tope para su ultimátum: el 27 de marzo. 14 días y sus respectivas noches para que el Presidente Imputado dimitiera. 

El PP vio en ese gesto de Ciudadanos una gruesa grieta en la oposición. ¿Cómo van a ponerse de acuerdo C’s, el PSOE y Podemos para echar al Presidente Imputado? Imposible, decían.

El PSOE, viendo que Sánchez se atornillaba al cargo y siendo el único partido con votos suficientes en la oposición para presentarla, movió ficha el jueves 23 de marzo y registró en la Asamblea una Moción de Censura contra el Presidente Imputado. Contaba con el apoyo de Podemos y una aceptación tácita de C’s, aunque éste presionaba para que tras la moción de censura hubiera un gobierno de transición que convocara nuevas elecciones. Nuevas elecciones, que beneficiarían a C’s. 

Hasta entonces y durante muchas semanas, el argumentario del PP estaba claro y lo expresaban todos los dirigentes del partido: 
  • "El Presidente no está formalmente imputado" (aunque lo estuviera) - La Vanguardia
  • "Sé que somos aburridos, pero no hay plan B" - Cadena SER
  • "No hay alternativa ni se va a sustituir a Pedro Antonio Sánchez" - ABC
  • "No se puede condenar ni demostró lo que nunca existió" - Expansión
  • "A Pedro Antonio le ampara la presunción de inocencia" - La Opinión de Murcia
  • "Dimitiré cuando haya una imputación formal" - El Confidencial
  • "Lo del auditorio son errores administrativos" - El País


Con la fecha puesta para la moción de censura presentada por el PSOE con su secretario general, Rafael González Tovar como candidato a la Presidencia de la Región, fue la decisión del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco de pedir la imputación del Presidente Imputado por 3 nuevos delitos en el marco del caso Púnica, la que provocó un nuevo terremoto en Murcia y precipitó los acontecimientos. 

Mariano Rajoy, cual César, envió al verdugo Martínez Maíllo a Murcia. Éste conllevó al Presidente Imputado al mismo borde del precipicio y le hizo pronunciar las sagradas palabras: “Ave Caesar, Morituri te salutant”. El Presidente imputado, devenido en gladiador caído miró a lo lejos al César y vio como éste, extendió el pulgar y señaló hacia abajo, hacia el abismo: Pollice verso. Entonces, Pedro Antonio Sánchez supo que estaba sentenciado.

El César Rajoy sacrificaba a su gobernador en Cartago Nova en pos de mantener el gobierno para su causa. Era la amistad, el honor y los principios en un lado de la balanza y el poder en la otra. Y ganó el poder. Una vez más. Rajoy es ese animal político empeñado en vender a su más apreciado amigo al mejor postor, con tal de seguir postergándose en el mando. Todo por el poder. En la vitrina de su casa en Pontevedra se exponen las cabezas de:

  • Paco Camps: "siempre estaré detrás de ti o delante, o a un lado"
  • Jaume Matas: "yo quiero un gobierno como el que tiene Matas"
  • Luis Bárcenas, "Luis, sé fuerte"
  • Alfonso Rus: "yo te quiero, Alfonso, te quiero c..."
  • Rita Barberá: "Rita eres la mejor. Eres la alcaldesa que merece Valencia"
  • Carlos Fabra: "Para nosotros es un ciudadano y un político ejemplar"
  • Ignacio González: "está gobernando con responsabilidad y capacidad de trabajo"
  • Rodrigo Rato, "es muy duro porque no está condenado por nada"
  • José Manuel Soria, "un buen amigo con un nivel de exigencia que no han demostrado otros"
  • Ana Mato, "confío en Ana Mato, porque es justo, se lo merece y es una gran ministra"
  • ... 
  • y a partir de ahora, la de Pedro Antonio Sánchez

Pollice verso, Pedro Antonio.


@ajcalzado

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